Carrito?

El día de ayer conversaba con Paula sobre su carro. Ella maneja un mazda del año... 94 creo, conservadito pero de hecho se nota que no es nuevo. Y yo, como ando interesado en motorizarme, pues quería conversar con ella y que me cuente un poco sobre cómo maneja los gastos de gasolina, cada cuánto le echa aceite, o le cambia el aceite, si lo afina, si pasó la revisión técnica, etc.

Naturalmente, ella con las justas me supo responder que no tenía un cálculo exacto de cuánto de gasolina gastaba, porque el medidor del tanque estaba roto, y sólo sabía en cuánto estaba su nivel cuando lo llenaba. Así que cada vez que iba al grifo pedía que le llenen el tanque. Pero también me contó cuánto le costaba y me dijo que si no se iba a la playa, pues tanqueaba una vez a la semana.

Así que me he propuesto algo mentalmente. Como yo en éste momento de mi vida, todo quiero, y todo lo quiero right now, debo de empezar a ahorrar no sólo para carro, depa y esas cosas, sino un ahorro real para gasolina y eso! No tomé en cuenta el mantenimiento ni esas cosas. Conversando con mi papá, me dijo que yo mida nomás la cantidad de plata que gasto en movilizarme ahora, y le sume un porcentaje, porque si bien muchas veces se gasta más en taxis, muchas veces también se ahorra. Porque comprar un carro ahora quiere decir que lo tienes que hacer pasar por la revisión técnica, que tienes que arreglarlo para eso, que hay que comprarle soat, seguro, etc, etc, etc... y si bien la idea de ir motorizado escuchando a Katrina and the Waves a todo volumen por la panamericana con Paula cantando a todo pulmón, me fascina... como que los gastos me abruman.

Creo que ya alguna vez hice ésta pregunta, pero lo digo de nuevo, realmente, cuánta es la ventaja de comprar un auto nuevo financiado por el banco, que comprar, de hecho más barato, un carro de segunda? Porque yo de mecánica sé muy poco, y me parece bastante lógico que tendría que hacer ver cualquier opción que tenga de segunda mano por un mecánico... y esa ojeadita que les daría, de hecho me va a costar.

Mmm... decisiones, decisiones...

A few of my favourite things!

Alguna vez escucharon hablar sobre esa niñita de la versión británica de American Idol? La chica que tenía no sé cuántos años, pero que es una enana total, sin dientes encima, y se llama Connie Talbot fue finalista en Britains Got Talent.
El otro día, mientras que bajaba algunas canciones de internet, se me coló la versión de ésta niña de "My favourite things". Esa canción que he visto en propagandas de... Mastercard, puede ser? Creo que sí. La canción donde enumeran las cosas favoritas de uno. Así que yo mismo he decidido hacer un top 10 de las cosas que más me gustan de donde estoy ahora mismo. Pero como un top 10 era muy largo, y recordé esa película con John Cusack y Jack Black donde hacen un top 5 de tooodo lo que les pasa, mejor hacer un top 5, y los dejo con una de mis escenas favoritas de esa película, y con un clip de la enana ésta, que de verdad es maravillosa! Y eso que a mi no me gustan mucho los niños y eso... pero ni modo. Hay que aplaudir nomás. Aunque creo que el que ganó el concurso esa temporada fue el gordito ese que canta ópera, no? En fin.

Top 5 de lo que más me gusta sobre mi status actual:

1.- Independencia económica: Nada más paja que poder salir a dar una vuelta sólo porque te dió la gana, y poder comprarte un helado, un periódico, invitarle a alguien un sandwich si se te da la gana, y no contar el sencillo con los dedos pensando en el método de transporte a elegir para regresar a casa dependiendo de la hora y la oscuridad de la zona.

2.- Libertad horaria: Si bien cuando uno tiene un jefe, se manejan las cosas de acuerdo a lo que él quiere, y puedes establecer un horario de entrada y de salidad, cuando no lo tienes, o cuando tú eres tu propio jefe, mantener un horario puede ser dificilísimo al principio, porque te la pasas en unas vacaciones contínuas. Pero cuando decides que las cosas tienen que cambiar, y realmente analizas la responsabilidad que te toca por tomar las decisiones que tomaste... pues mostro. Nada más bacán que tirarte a dormir después de almuerzo por una horita y decir que estás en reunión de directorio. Jajaja

3.- Paula. Me encanta haber conocido a una persona, y no esconderme tras traumas platenses, o de si salimos o no. Me encanta que puedo pasarme horas conversando con ella, y sentir que la conozco de toda la vida, cuando en realidad nos hemos visto tan poco. Eso me hace sentirme tan cómodo con ella, y al mismo tiempo expectante! Es como reconocer a una persona que conociste en otra vida. Simplemente genial. Brian Weiss, tendrá algo de cierto?

4.- Respeto. Creo que la independencia, la responsabilidad con mis horarios, y el hecho de que me vean feliz e ilusionado por una nueva persona en mi vida, han logrado que en casa me miren con nuevos ojos. Aporto, ayudo, les comento sobre mis planes de abrirme y alquilar mi propio departamento, mis ganas de superarme, etc... y noto que si bien no están taaan de acuerdo con que me vaya a vivir a otra parte, sí les hace feliz saber que he crecido, y que no estoy estancado en un trabajo que odio, o haciendo cualquier cosa que simplemente me mantenga ocupado por un salario ínfimo.

5.- Lectura. He descubierto que para poder trabajar de forma constante, leer es una ayuda tremenda! Y hay tantos libros inspiradores que me están ayudando a abrir la mente a nuevas posibilidades, y a simplemente dejar atrás cualquier preconcepción en relación a cómo debo llevar mi vida, o si debo dejar que el rumbo económico me afecte a mi. Además de haber descubierto unas nuevas novelas históricas y bestsellers que compro sin asco y por pura diversión. La lectura me está ayudando mucho, y me estoy haciendo un hábito que me está gustando y enorgulleciendo.

Y ustedes? Sus top5!

Feliz día de San Volantín!

De hecho no tengo planes para el día de hoy.
En realidad hubiese sido paja poder salir con la chica de los ojos celestes (Paula, de mamá argentina, papá peruano, más peruana que el frontón, pero parece una diosa noruega), pero ella tenía que ponerse al día con cosas de trabajo.

Sí, salimos durante la semana. De hecho mi historia como que no le pareció muy ajena, y si bien ella tenía sentimientos encontrados en relación a TravelOne, una vez que le expliqué la forma en la que uno tiene que manejar ésta clase de trabajo, comprendió que se necesita más motivación y deseo de superación que en cualquier otra chamba, y creo que eso le dió un buen concepto sobre mi.

Ella trabaja en una agencia de publicidad, así que sus horarios andan siempre sancochados. Al principio pensé que lo de trabajar un día de San Valentín era una roca total, pero recordé que me comentó eso el primer día que nos conocimos, que aprovechaba para ir a la playa ese fin de semana, porque éste lo tenía complicadísimo, y que encima tenía una jefa buenísima gente, pero media loca, de esas que quieren todo para ayer.

Igual, tampoco es que quiera salir. Si bien estoy ganando bastante bien de acuerdo a mi standard (osea... mínimamente triplicar mi previo salario), la idea tampoco es gastarlo todo en cosas del día a día, y de hecho antes no me alcanzaba para salir con una chica, o tenía que pedir prestado o ingeniármelas para hacerle creer que sólo tenía tiempo para ir al cine un día martes o algo así, así que el punto básicamente es que si me quedo en casa, mejor.

Además, en las calles hay demasíada gente! Yo entiendo que es un día donde uno expresa amor y gratitud, etc... pero por qué no lo hacen desde sus casitas? Por qué tienen que volcarse todos a la calle al mismo tiempo? En fin, felizmente hace tanto calor que quedarse en la sombrita de la casa no hace daño. Aprovecho para ponerme al día con mis dvds. (Me compré mi tele y mi dvd!!!!).

Ojos Celestes

Estuve dando vueltas por la playa, en afán de conocer nuevas personas, de veranear tranquilo con un par de amigos mientras aprovechábamos para hacer algo de negocios, intentar presentarle nuestra propuesta a algunas personas, y la vi.

Naturalmente, uno de mis amigos se acercó primero, en un intento torpe de invitarla a conversar sobre una oportunidad de negocio. Su cara de "de verdad no me interesa" me mató, me aniquiló. Les juro que esa clase de mujeres me desarman. Será que me gusta un poquito el rechazo, los retos o el masoquismo? Jaja.

El asunto es que cuando mi amigo regresó al grupo, con el rabo entre las piernas y nos dijo "Pff... está bien buena, pero es antipatiquísima", decidí no hacerme para nada el canchero, y tratar de ser yo mismo. Naturalmente cuando les dije eso a mis amigos me dijeron que estoy completamente loco. En fin.

Así que me acerco lentamente a donde ella está echada, y al acercarme, me tropiezo malaaaazo! Y ella, en un intento por gritarme por tirarle arena, me mira y al ver mi tobillo hinchándose como si se tratase de una llanta de bicicleta recién inflada, se reprime en medio del grito y me mira con cara de espanto. "Estás bien?".

Lamento decir que mi masculinidad no pudo con el dolor, así que en lugar de decir "sí, claro... no pasa nada" y mostrar mi sonrisa Kolynos tuve que aguantar el aullido que se escapaba por mi garganta. Ella me dijo, "te ayudo, espera", y me tomó del brazo, haciendo un movimiento que hizo que sus lentes de sol salgan disparados a la arena. Intenté pararme por mi mismo, y cuando levanté la mirada finalmente, me topé con dos zafiros de tamaño de monedas de 5 soles! A partir de ese momento, todo dolor fue fingido, porque no recuerdo haber sentido más que su mano en mi brazo. No sé qué cara debo de haber puesto, pero ella no dejaba de apartar la mirada y reir. Ahora que lo escribo lo recuerdo ligeramente y me averguenzo completa y absolutamente de mi falta de charm, jaja.

Me llevó a una pequeño restaurant a pocos metros de donde estábamos, y consiguió algo de hielo. Nos sentamos en una mesa que daba a la playa, mientras que examinaba la manzana roja que era ahora mi pie. Descarté cualquier lesión grave, de forma inmediata, porque no quería alarmarla, y además tenía ya experiencia con ésta clase de torceduras, así que la tranquilicé. Cuando llegó el hielo, lo apliqué suavemente a la zona, mientras ella me contaba que había bajado a la playa sola porque sus amigas todavía estaba durmiendo la mona de la noche anterior, y que normalmente bajaba hasta dentro de unas horas. Pero que ella, como andaba más blanca que queso arequipeño, había aprovechado para agarrar algo de colorcito previamente, de paso para que no se burlen de ella sus amigas.

Mientras que la conversación fluía de forma interesante, vi asomarse la cabeza de mis amigos a lo lejos, como quien intenta descifrar cómo es que un fulando cayéndose encima de una chica termina sentado en un restaurant con ella, así que en un gesto semi victorioso, me di la vuelta y la pregunté a la nueva futura señora de Moritz El Viajero, "una cervecita?".

Y la hice.